Condenado por mirarle el celular a su mujer: un año de cárcel y multa de 2.160 euros
La Audiencia Provincial de Madrid impuso la pena, con prohibición de acercarse a menos de 500 metros de distancia y de comunicarse con ella por dos años.
El hombre deberá pagar por un delito de delito de descubrimiento de secretos, luego que se apropió del teléfono celular de su esposa y leyó sus mensajes de WhatsApp.
La ley penal española establece que: "El que, para descubrir los secretos o vulnerar la intimidad de otro, sin su consentimiento, se apodere de sus papeles, cartas, mensajes de correo electrónico o cualesquiera otros documentos o efectos personales, intercepte sus telecomunicaciones o utilice artificios técnicos de escucha, transmisión, grabación o reproducción del sonido o de la imagen, o de cualquier otra señal de comunicación, será castigado con las penas de prisión de uno a cuatro años y multa de doce a veinticuatro meses".
El hombre condenado, de nacionalidad española, estaba casado con la víctima, con quien tiene un hijo de 11 años. La sentencia da cuenta que la relación matrimonial estaba deteriorada y que cuando la mujer manifestó su voluntad de separarse, su marido "comenzó a tener actitudes de acoso y control hacia ella, cogiéndole el teléfono sin su autorización, cambiándole la contraseña y leyendo sus mensajes de WhatsApp y de redes sociales, así como fotografías".
Además, como parte de su estrategia de control sobre la mujer, el hoy condenado, durante un viaje "sólo se lo dejó usar puntualmente, pero poniendo el acusado su contraseña y volviendo a apoderarse del teléfono una vez que su esposa lo había usado".
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